Muchas lecciones Feldenkrais están diseñadas para que el estudiante no sepa que vendrá a continuación, para ayudar a las personas a estar en lo desconocido. Mientras algunas de las lecciones repiten los movimientos en ambos lados del cuerpo, otras no lo hacen. Si un estudiante se anticipa o asume lo que sigue y se esfuerza por descubrir la estructura de la lección, perderá la oportunidad de estar plenamente presente con lo que está pasando.
No decimos al inicio cuál será la etapa final. Moshe Feldenkrais
Incluso si una lección se centra en una determinada parte del cuerpo, luego podemos descubrir cambios en otros lugares o notar mejoras en los movimientos que, aparentemente, no tienen relación con lo que se hizo hincapié y se destacó en la clase.
No hay resultados predecibles cuando uno viaja por los caminos de la conciencia, y con fuertes expectativas de lo que podría suceder, vamos en contra de darnos cuenta de lo que está surgiendo.
No diciendo desde el principio lo que será el final, estamos abiertos a las sorpresas, a lo inesperado y podremos sorprendernos por lo que está sucediendo y lo que vamos aprendiendo.
¡Ábrete a lo inesperado, a lo desconocido, explora, investiga, disfruta!
Un cuerpo repetido se desvanece y se vicia, un cuerpo despierto descubriendo es un cuerpo en contacto.- grax por tus enseñanzas.
gracias a ti, Maria Lorena, por comentar y seguir este blog. Saludos desde Barcelona.
Esto me recuerda mucho a la estrategia iniciática de los maestros sufís. Introducen cambios inesperados en las actividades con los discípulos, incluso cambian en el último momento la fecha de un encuentro. El caso es romper rutinas como decía Castaneda. Interesante enfoque.
Pues sí, José, éste método nos motiva e impulsa a salir de nuestra zona de confort, de lo conocido y predecible para explorar nuevos movimientos y así incorporarlos al repertorio que ya tenemos. Gracias por tus comentarios y tu interés. Saludos.