Prueba esta exploración corta para redescubrir la conciencia de tus pies y tobillos:

1. De pie en el suelo con los pies abiertos a la anchura de la caderas.
2. Siente cómo tus pies hacen contacto con el suelo.
3. ¿Hay más peso en el pie derecho o el izquierdo, en el talón, la parte media del pie o en los dedos del pie?
4. ¿Tus rodillas están bloqueadas o suavemente dobladas? ¿Cómo puedes cambiar la organización de tus rodillas para contribuir a la comodidad del pie?
5. Concéntrate en tu pie derecho. Pasa el pie hacia el arco exterior y luego de regreso al centro, prestando atención al movimiento a través de todo el pie. Observa cómo utilizas el tobillo para facilitar el movimiento y tratar de mantener la rodilla relativamente tranquila.
6. Repite varias veces. Presta atención a cómo el movimiento resuena a través de todo tu ser y cómo estás respirando.
7. A continuación, haz el movimiento contrario – mueve el pie hacia el arco interior, de nuevo a través de tu pie y con el tobillo, manteniendo la rodilla tranquila.
8. Combinar los dos – en movimiento fuera y luego dentro. ¿Hay un eco del movimiento en la articulación de tu cadera y en la pelvis?
9. Haz una pausa por unos momentos de pie.
10. Repite el movimiento con el pie izquierdo.
11. Para y  descansa. Observa cómo tus pies hacen contacto con el suelo ahora.
12. Camina un poco.

¿Sientes que caminas diferente?

Puedes completar esta clase, con este vídeo: Cómo estar mejor de pie

♥ Recuerda leer, las pautas a seguir, antes de empezar cualquier lección.

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