Comparto este maravilloso poema, extraído de EL LIBRO TIBETANO DE LA VIDA Y LA MUERTE, que estoy releyendo estos días.
En él, se evidencia claramente, cuanto nos influencian nuestros viejos hábitos, y a la vez, en qué medida ellos nos limitan quitándonos libertad.
La simpleza de sus palabras, nos permiten reflexionar acerca de cuáles son las áreas de nuestra existencia que pueden estar condicionadas por antiguos paradigmas y a la vez, el quinto acto, deja una mirada optimista vinculada con el cambio profundo y sincero.
AUTOBIOGRAFIA EN CINCO CAPÍTULOS
1) Bajo por la calle
hay un hoyo profundo en la acera
me caigo dentro
estoy perdido…me siento impotente.
No es culpa mía
tardo una eternidad en salir de él.
2) Bajo por la misma calle
hay un hoyo profundo en la acera
finjo no verlo
vuelvo a caer dentro
no puedo creer que esté en el mismo lugar.
Pero no es culpa mía
todavía me lleva mucho tiempo salir de él.
3) Bajo por la misma calle
hay un hoyo profundo en la acera
veo que está allí
caigo en él de todos modos… es un hábito
tengo los ojos abiertos
sé donde estoy.
Es culpa mía
salgo inmediatamente de él.
4) Bajo por la misma calle
hay un hoyo profundo en la acera
Paso por al lado.
5) Bajo por otra calle.
Pero ¡qué difícil puede ser volver la atención hacia dentro! ¡Con qué facilidad nos dejamos dominar por nuestros viejos hábitos y costumbres establecidas! Aunque nos acarrean sufrimiento, como dice el poema de Nyoshul Khenpo, los aceptamos con una resignación casi fatalista, porque estamos acostumbrados a ceder a ellos. Podemos idealizar la libertad, pero en lo que toca a nuestros hábitos estamos completamente esclavizados. Aun así, la reflexión puede traernos poco a poco la sabiduría. Podemos llegar a darnos cuenta de que caemos una y otra vez en pautas de conducta fijas y repetitivas, y empezamos a sentir el anhelo de librarnos de ellas. Naturalmente, podemos recaer una y otra vez, pero poco a poco podemos deshacernos de ellas y cambiar. Reflexión y Cambio. página 55
Lo que más me esperanza, es la firme convicción de que sólo podemos cambiar cuando somos conscientes del problema, y que el dolor que nace del cambio, es infinitamente más soportable que el permanecer en la cárcel de la repetición.
Pingback: Cambia tus creencias y tu vida cambiará | ~ Feldenkrais® Barcelona ~·
Pingback: Cambia tus hábitos, Cambia tu vida | ~ Feldenkrais® Barcelona ~·
Me encanta 🙂 un abrazo fuerte, fuerte!!
Gracias, Cristina, otro también fuerte para ti 🙂
Gracias muy bello
Enviado desde mi iPad
Gracias, Matilde, saludos.