Pensar sin pensar, hacer sin hacer alcanzar un estado en el que tu cuerpo actúa de manera inconsciente y natural sin interferencias.
El objetivo del Método Feldenkrais es liberar al cuerpo de las tensiones innecesarias para las tareas del día a día y así conseguir un cuerpo y por tanto una mente, más saludable. Ir más allá en el conocimiento del cuerpo de cada uno, escucharlo y permitir que sea él mismo, libre, no condicionado.
Lo que más me fascina de la filosofía que hay detrás del método es el hecho de tener como referencia los movimientos que hacen los bebés , cómo reacciona el cuerpo humano cuando aún está «libre». Esto, y la fe en que la esencia de las personas como seres humanos primitivos no está del todo perdida y que dentro de nosotros sigue habiendo un mamífero que sabe cómo moverse, como caminar, como mirar y cómo compartir sin que dependa de ninguna proceso educativo … es maravilloso.
Feldenkrais nos lleva a descubrir cómo lo que realmente somos, animales inteligentes con una gran energía y unas posibilidades ilimitadas, y nos lo demuestra con lo que nos resulta, dentro de todo, más fácil de cambiar, los patrones físicos y de movimiento.
A través de diferentes ejercicios hace que vayas descubriendo sensaciones nuevas y, estas sensaciones, le hacen ver a tu cuerpo y a tu cabeza que otra manera de sentirse es posible.
Es así de simple y así de complicado a la vez … es hacer, sin hacer y pensar, sin pensar.
A partir del momento que comprendemos, por haberlo experimentado con el propio cuerpo, que cambios profundos en nosotros mismos son posibles, se abre el camino hacia la madurez, el desarrollo y la creatividad. Moshé Feldenkrais